Papermag: El lado oscuro de Bruno Mars

Hace apenas dos años, Bruno Mars era la inspiración de la serie musical de Fox. Su elenco de jóvenes cubrieron dos de sus canciones de éxito en el show. Conseguir el reconocimiento en 'Glee' era sólo una pequeña parte del enorme éxito que este antiguo imitador de Elvis en Hawaii ha disfrutado desde 2010.
Durante ese período, Bruno lanzo su debut (Doo-Wops & Hooligans), que fue disco de platino 39 veces, escribió 11 top 10 hits y ganó un Grammy (por "Just the Way You Are"). Ha sido un viaje épico que ahora entra en el territorio arriesgado con su segundo disco, "Unorthodox Jukebox", a la venta el 11 de Diciembre.

Si 'Doo-Wops & Hooligans' giro en torno a 'G-rated romance' (historias de amor), 'Unorthodox Jukebox' tiene que ver con el sexo. El nuevo álbum aún exhibe la singular habilidad de Bruno por las melodías irresistibles, tolerantes, evidente en éxitos pasados ​​como "Just the Way You Are" y "Grenade". Sin embargo, aunque muchas de las letras de 'Doo-Wops' se han centrado en el amor abrumador - a veces correspondido, a veces no - 'Jukebox' entra en un lugar más pesado, que habita en una abrumadora pérdida de coche causado por largas fiestas y por mujeres salvajes.

Esto hizo que fuera un ajuste perfecto para 'The Victoria's Secret Fashion Show'. "Estas mujeres hermosas están caminando en la ropa interior", dice Bruno. "Y estoy básicamente derramando mi corazón a ellas diciendo que son la razón por la que soy como soy".

Está claro que a Bruno le gusta a las damas. Sentado en un restaurante japonés en el Lado Este del Bajo Manhattan, es un gran coqueto. Demasiado encantador para estar siempre irritante.

Sus interacciones con el sexo opuesto no siempre terminan bien. El segundo single de su nuevo álbum titulado "Young Girls" canta: "Todas vosotras chicas jóvenes y salvajes, me tienen hecho un desastre". La canción se trata de "un tipo joven, salvaje" que pasa a "perderse en la salsa", dice Bruno. "Sales todas las noches. Bebes todas las noches, ser joven... buscando amor en los lugares equivocados." Se trata de intentar "tomar el control de tu vida", explica.

Las nuevas canciones "definitivamente podría ser más oscuro, un poco más agresivo", señala. "Estoy diciendo algunas cosas que probablemente va a abrir muchas de esas puertas."

Una de esas puertas oscuras a las que Bruno se está refiriendo es a su arresto en 2010 en Las Vegas por posesión de cocaína. "Sé que una vez que conste en acta, estará en el registro para siempre." (Aunque los cargos de posesión han sido borrados después de algunas multas, servicio comunitario y consejería.)

"Es extraño", admite, "porque es más fácil para mí sentarme a escribir una canción que en realidad hablar de ello." Bruno nunca producirá una canción a menos que comparta "una historia personal, un problema personal, cualquiera que sea personal" - incluso si eso se hace vulnerable al escrutinio tabloide o medios potencialmente alienante de una mayor base de fans acostumbrados a sensibleras canciones de amor en Glee. Sin embargo, insiste: "No estoy tratando de ser oscuro. Es sólo que trato de ser honesto y abierto".

Y mientras que Bruno reconoce los riesgos que implica apartarse de la fórmula del éxito tan pronto, él proclama que él no tiene "miedo al fracaso". Esta actitud nunca fue más evidente que durante su actuación como anfitrión en 'Saturday Night Live' en Octubre.

A pesar de su éxito comercial hasta el momento, Bruno no es Justin Timberlake. Él no es Sting. Y desde luego, no ha alcanzado aún la fama de Mick Jagger. Todo esto contribuyó a la conmoción generalizada de que un cantante con un sólo registro fuera y cero créditos como actor (a excepción de una aparición como "Little Elvis" hace veinte años) se uniría a la mencionada lista de músicos ilustres que han duplicado como anfitriones SNL. "A día de hoy no sabemos por qué sucedió eso", confiesa. "Yo era escéptico. Todo el mundo se mostró escéptico."

Mars recuerda haberle dicho al jefe de guionistas Seth Meyers, "He firmado para salir en llamas". Pero reparos iniciales a un lado, se mantuvo impávido: "Es cómo, no estabas hecho para esta mierda si no puedes asumir algo así, no estabas preparado para ella. Así que fue una especie de reto era... 'A la mierda, vamos.'"

Y ese parece ser el hilo conductor de toda su experiencia: "El secreto de nuestro éxito fue sólo esa actitud".

Afortunadamente, la aparición en SNL fue un tremendo éxito, obteniendo las calificaciones más altas del programa hasta ese momento en la temporada. En un sketch, Bruno tuvo un pasante en Pandora durante un apagón masivo. Ante el apocalipsis potencial de seguir cinco minutos sin radio por Internet, el personaje de Bruno debe llenar el silencio, cantando como Katy Perry, Louis Armstrong y Michael Jackson, entre otros.

Peter Gene Hernández, nació en una familia tremendamente diversa en Hawai. Su padre, un percusionista, era de ascendencia puertorriqueña, mientras que su madre, una bailarina de hula y cantante, emigraron de las Filipinas. La pareja compartió una pasión por la música, que inculcó en Bruno y sus cinco hermanos en una edad muy joven. Cuando Bruno Mars creció, comenzó a tocar con la banda de la familia, ampliando su repertorio de imitación musical de otros artistas como Jackson y The Temptations.

A la edad de 16 años, salió por su cuenta, con regularidad realizaba covers como el acto de apertura de cada noche en un espectáculo de magia en frente de miles de turistas asiáticos. Bruno dice que fue entonces cuando se dio cuenta de que "esto no es lo que yo estoy destinado a hacer ... No puedo despertar dentro de diez años diciendo: 'Aloha, bienvenidos al show de magia!"

Bruno decidió seguir a su hermana mayor a Los Angeles, y en 2004 firmó con Motown. Como un niño que creció en Marvin Gaye y Stevie Wonder, Bruno pensó que dio en el clavo: "Es como un sueño hecho realidad". Pero entonces, no pasó nada.

"Me sentí como que al firmar  me dejaron de lado", dice. "No tienes dinero y estas tratando de averiguar lo que pasa, y es entonces cuando recibes la llamada telefónica diciendo: 'Sabes, creo que lo mejor es que vayamos por caminos separados'".

Mirando hacia atrás, apunta que estaba demasiado verde y carente de rango en su escritura. "Yo sólo estaba gestando y aprendiendo", dice. "Cada canción que escribía era una canción de amor, R&B".

Y mientras que Bruno admitió sentirse como un fracaso, recibió el estímulo suficiente de la industria para continuar. A los ejecutivos de discográficas les gustaron algunas de sus canciones, pero se las querían dar a otros artistas. "Esa fue la encrucijada en mi vida", dice. "O soy un snob y digo: 'Esta es mi música' y regreso a Hawai sin un centavo, o acepto la oferta para crear música para los demás". Bruno dice: "Nunca hubo un plan B, hacer música es "todo lo que quería hacer siempre." Y así, él eligió la segunda opción.

Pronto conoció al compositor Philip Lawrence y al ingeniero Ari Levine. Los tres se unieron para formar el equipo de producción y composición 'The Smeezingtons'. "Estábamos haciendo por nuestra cuenta. Viniendo con música que nos emociona", dice Bruno. Y por la noche cubría las canciones de una banda de bar con Jeff Bhasker (que llegaría a los registros para Kanye West, Fun y Beyoncé). "Eso me ayudó mucho como compositor y productor, lo que abarcan aquellas canciones. Antes que nada, ¿sabes cómo es de inspirador cubrir una canción como 'Billie Jean'?" , pregunta. "Ves que los ojos de la gente se iluminan y ves la reacción, lo que la canción hace a la gente."

Con The Smeezingtons, empezó a escribir para todos, desde Flo Rida a Matisyahu. Y entonces el avance se produjo en 2010, cuando él co-escribió y produjo dos canciones que encabezaron las listas: ". Fuck You" de Cee Lo Green y "Nothin 'on You" de BoB. 'Doo-Wops' fue lanzado poco después, debutó en el número tres en el Billboard 200.

Dos años después de Doo-Wops, el Jukebox acertadamente titulado Unorthodox presenta una mezcla inesperada y ecléctica de estilos musicales. Trabajo con colaboradores de estrellas como Mark Ronson y Diplo, por no hablar de los viejos socios The Smeezingtons y Bhasker, Jukebox evoca esas mismas canciones que canto Bruno en los bares sólo unos pocos años atrás, "Billie Jean", "Roxanne", "Purple Rain ", el tipo de canciones que te suenan tan pronto como se las escucha".

"La música se supone que te pone en un estado de ánimo o te hacen sentir algo emocionalmente", dice Bruno en un raro destello de seriedad. "Por la misma razón por la que vas a ver una película. No tengo el lujo de caracteres, como una película. No puedo pintar un cuadro para alguien ... No tienen tres horas para que dure algo. Tengo tres minutos y medio para que sientas algo. Tres minutos y medio para hacerme sentir algo."